Los fiscales federales Francisco Snopek y Juan Manuel Sivila
presentaron ayer un recurso de casación de la sentencia dictada por el Tribunal
Oral Federal de Salta en la conocida como Megacausa, en la que durante más de
un año y medio se juzgó a 17 hombres por delitos de lesa humanidad cometidos en
perjuicio de 34 personas. Entre otros pedidos, insistieron en la condena a los
militares retirados Marcelo Diego Gatto y Fernando Chaín, quienes fueron
juzgados acusados por el secuestro del conscripto Víctor Brizzi, que se
encuentra desaparecido, y resultaron absueltos por el beneficio de la duda. También
reclamaron que el civil Juan Manuel Ovalle, condenado a 6 años de prisión, reciba
una pena de prisión perpetua por homicidio agravado, por la desaparición de la
docente Silvia Benjamina Aramayo.
Los fiscales sostuvieron que la sentencia, dictada el 20
de diciembre de 2013 por un tribunal integrado por los jueces Carlos Jiménez
Montilla, Marcelo Juárez Almaraz y Marta Liliana Snopek, es arbitraria, no observa
las formas procesales y aplica erróneamente el Código Penal.
Antes de este recurso, y tras conocer los fundamentos de
la sentencia, los fiscales pidieron que el Tribunal aclarara algunos puntos.
A fines del año pasado el Tribunal condenó a 15 de los 17
acusados, los militares Carlos Alberto Mulhall, Joaquín Cornejo Alemán, Miguel Raúl
Gentil, Virtom Modesto Mendíaz, Héctor Ríos Ereñú y Ricardo Benjamín Isidro de
la Vega, los policías Joaquín Guil, Mario Reinaldo Pachao, Julio Oscar Correa,
Jacinto Ramón Vivas, Raúl Eduardo Toledano, Felipe Caucotta y Víctor Hugo
Almirón, el ex guardiacárcel Juan Carlos Alzugaray y el civil Juan Manuel
Ovalle. Las penas van desde la prisión perpetua a los 5 años de prisión.
En 12 de estos 15 casos los fiscales encontraron razones
para apelar, y pidieron penas más duras. Solicitaron que se revea la absolución
a los mayores Gatto y Chaín, para los que solicitaron la pena de 3 años y 8
meses de prisión, como partícipes secundarios del delito de privación ilegítima
de la libertad agravada, pedida en el alegato del juicio por el fiscal federal
Ricardo Toranzos. Para ahorrar tiempo, Snopek y Sivila pidieron a la Cámara Nacional
de Casación Penal (que deberá entender en este recurso) que dicte ella misma
las condenas, en vez de remitir nuevamente la causa al TOF de Salta para que
dicte una nueva sentencia.
La condena a Mulhall (a prisión perpetua por 20 homicidios
agravados, un homicidio simple, 14 hechos de privación ilegítima de la libertad
agravada, un hecho de apremios ilegales, violación en perjuicio de una persona e
imposición de tormentos a otra) fue apelada también. Los fiscales cuestionaron la
falta de agravantes para el asesinato del ex policía Pedro Bonifacio Vélez,
calificado por el tribunal como un homicidio simple; entre otros aspectos, cuestionaron
que, aun cuando el fiscal Toranzos describió la práctica de secuestro, torturas
y disposición final (lo que implicaba pasar al detenido a disposición del Poder
Ejecutivo Nacional o su desaparición), el Tribunal haya condenado a Mulhall por
los homicidios de algunas víctimas y no se haya pronunciado sobre el pedido de
condena por las privaciones ilegítimas de la libertad y la imposición de
tormentos.
Snopek y Sivila observaron que Gentil y Guil hayan sido
condenados como autores mediatos de la matanza de los jóvenes Alfredo Mattioli,
Ricardo Tapia, Liendro y Marcial Estopiñán. Pidieron que se respete el pedido
de Toranzos y se los condene como autores directos.
Solicitaron también revisiones de la sentencia sobre
Correa, Almirón, Pachao, Toledano.