martes, 4 de diciembre de 2012

Señalizaron Villa Las Rosas y la delegación de la Policía Federal

El penal de Villa Las Rosas y la Delegación Salta de la Policía Federal fueron señalizados ayer por haber funcionado como centros clandestinos de detención y tortura. por la lluvia se realizo dentro de la penitenciaria el acto y luego con la presencia de Ministra de Derechos Humanos y las autoridades de la penitenciaria se procedió a inaugurar la placa.
En el acto central, frente a la Federal, los organismos de derechos humanos leyeron un documento en el que recordaron el compromiso de los desaparecidos y exigieron respeto por los derechos humanos. Señalaron como casos paradigmáticos de violaciones a los derechos humanos en la provincia la no entrega de sus tierras a los pueblos originarios, los conflictos con el campesinado, el incendio en la Comisaría de Orán en 2008 y los apremios ilegales y vejámenes que se cometen en la provincia.

La señalización fue organizada por organismos de derechos humanos de la provincia y Unidos y Organizados Salta, y contó con la presencia de familiares de víctimas y de víctimas del terrorismo de Estado; también asistieron la coordinadora general del Archivo Nacional de la Memoria, de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, Judith Said; y concejales capitalinos, como Tomás Rodríguez y Martín Ávila.
En la cárcel de Villa Las Rosas estuvieron detenidos los once presos políticos asesinados en la conocida como Masacre de Palomitas, cometida el 6 de julio de 1976 sobre la ruta nacional 34, pasando la estación de peaje Cabeza de Buey.
Las víctimas eran profesionales, estudiantes y delegados estudiantiles que militaban en distintas agrupaciones políticas como Montoneros, el Frente Revolucionario Peronista (FRP) y el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), cuyo brazo armado era el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). Entre las víctimas estuvieron Celia Leonard y su esposo, Benjamín Ávila. Una de las oradoras de ayer fue, precisamente, Nora Leonard, ex presa política además de hermana de Celia.
También pasaron por este penal el empleado municipal René Russo, de Orán, y el dirigente rural Raúl Benjamín Osores, detenido por Gendarmería en Embarcación. Ambos fueron trasladados a la cárcel de Villa Las Rosas y luego desaparecidos.
El acto principal se realizó en frente a la Delegación Salta de la Policía Federal, también señalizada por haber funcionado como un centro clandestino de detención y torturas antes y durante la última dictadura cívico-militar.
En ese lugar fue visto, muy golpeado, el militante justicialista Eduardo Fronda, cuyo cuerpo apareció en enero de 1975 en el camino a Lesser, en la jurisdicción de la villa veraniega de San Lorenzo.
La ex presa detenida política Mirta Torres estuvo detenida en este lugar, donde fue sometida a torturas y a simulacros de fusilamiento, y presenció la tortura a otros detenidos. También el periodista Eduardo Tagliaferro fue torturado en esta sede policial. Y la ex detenida política Julia García declaró haber sufrido abuso sexual en ese lugar, donde también fue violada la detenida Evangelina Botta de Linares, luego trasladada a la cárcel de Villa Las Rosas, de donde fue sacada para ser asesinada en Palomitas. Todos los testimonios sindican al ex federal y ex guardiacárcel Juan Carlos Alzuragay como uno de los torturadores y abusadores sexuales. También el comisario Federico Livy (ya fallecido) ha sido sindicado como uno de los represores más feroces. Hay testigos que señalan a Livy como uno de los jefes en Salta de la organización terrorista Alianza Anticomunista Argentina (Triple A).
La Masacre de Palomitas cuenta con dos sentencias: en diciembre de 2010 fueron condenados Carlos Alberto Mulhall, Miguel Raúl Gentil y Hugo César Espeche; en diciembre de 2011 la condena llegó para Luciano Benjamín Menéndez, Joaquín Guil y Alzugaray. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario